Alemania está a la cabeza del reciclaje en Europa. Según datos suministrados por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat), el reciclaje en Alemania tiene un porcentaje del 66,10%, osea, que dos terceras partes de los residuos son reciclados en el país germano.
Estas cifras están en concordancia con las políticas del gobierno alemán y con la cultura de la población de esta nación. De esta manera están sobrepasando las metas de la directiva europea de residuos que establecen que los países de la Unión Europea deben garantizar el reciclaje para desechos, al menos en un 50%, en el 2020.
La idea es que los materiales reciclables se puedan reutilizar y reciclar de manera efectiva. Materiales tales como metales, papel, vidrio y el plástico de los residuos domésticos son el principal objetivo de estas políticas de reciclaje en Alemania.
Pero al parecer no todo es color de rosa ya que estos números alemanes podrían estar sobrevalorados, especialmente con ciertas situaciones con respecto al reciclaje de plástico.
En este artículo...
¿Reciclar o dejar de producir basura?
Aunque los números de Alemania con respecto al reciclaje son excelentes, también es cierto que este país produce más basura por habitante en una cantidad superior a la media del resto de Europa.
El principal dilema actual se presenta con respecto al reciclaje de plástico. Según estudio del IdW, en Alemania, no todo lo que se recolecta es reciclado, por lo que se infiere que esos números no reflejan en la práctica un amor verdadero por el medio ambiente.
Alemania no es ajena a esa nefasta política del consumismo que nos afecta a todos. Los alemanes se acostumbraron a al facilismo de comprar, usar y desechar.
En la actualidad, millones de toneladas de plástico es desechada a diario en el medio ambiente. Muchos de esos desechos van a los mares donde están provocando un daño terrible al ecosistema.
Soluciones Propuestas
El debate está en pie. Se han propuesto legislaciones sobre dejar de usar plástico. Esto no parece factible, especialmente por los enormes intereses económicos que representa esta industria.
La misma industria del reciclaje de plástico es enorme en si, pues estamos hablando de unos 2.000 millones de euros anuales.
¿Entonces, qué se puede hacer?
Pensamos que lo primero es minimizar el modelo consumista lo cual requiere un alto nivel de conciencia ciudadana. No queremos ser pesimistas pero luchar contra el sistema es casi una pelea perdida.
Pero hay que intentarlo. Es eso o la destrucción del planeta.
Por los momentos el gobierno alemán es consciente del problema. Eso es muy positivo. Se ha planteado que se ingenien nuevas tecnologías que permitan un reciclaje eficiente del plástico. También se podrían usar materiales alternativos biodegradables y/o reutilizables, como las bolsas ecologicas.
Es muy cómodo usar una pajilla y luego tirarla. Pero multipliquemos eso por millones. Ese es el verdadero problema. Y el reciclaje no lo va a solucionar, por mucho que la clase política en Alemania siga inistiendo en ese camino…
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