Berlín en 3 días
La capital alemana se antoja como un destino muy apetecible sean cuales sean tus circunstancias personales, da igual que seas un urbanitas que viaja solo, Berlín siempre tiene algo con lo que te va a sorprender.
La ciudad tiene los elementos necesarios para que te quedes con las ganas de volver, ya no solo por historia, sino por la increíble vida social y cultural con la que cuenta, por lo que cualquier visitante encuentra su hueco en Berlín.
En este artículo te contaremos que hacer en Berlin si cuentas con tres días para visitarla!
En este artículo...
Un poco de historia
Berlín fue fundada en el siglo XIV tras la unión de dos pueblos, y que formaron una aglomeración de 7.000 habitantes. Desde entonces siempre ha tenido una trayectoria ascendente, siendo capital de uno de los Estados del Sacro Imperio Romano Germánico en el siglo XV. Posteriormente, en 1871 se concierte en capital del Imperio Alemán.
Tras la II Guerra Mundial, tras la caída del muro en 1989, Berlín ha recobrado el pulso y ha logrado convertirse no solo en una ciudad de referencia a nivel económico y empresarial, sino de ocio y cultura.
Viajar a Berlín
Posee dos aeropuertos y es posible encontrar conexiones con todas las capitales europeas, a las que puedes viajar con compañías tradicionales o de bajo coste. Estos establecimientos aeroportuarios son Berlín-Tegel (TXL), a 8 kilómetros de la ciudad y que será absorbido por el de Berlín-Schönefeld (SXF) tras la ampliación de este, convirtiéndose ambos en el aeropuerto de Berlín-Branderburgo.
Puedes encontrar verdaderas gangas para viajar en avión a la capital germana, por lo que lo mejor es estar al tanto de las ofertas que lanzan las aerolíneas. Plantear una escapada y viajar a Berlín en 3 días es por tanto perfectamente posible. Ya sea si se trata de un grupo familiar o viajes sorpresa en pareja, posee todo lo necesario para sorprender y que te quedes con ganas de regresar.
Qué hacer en Berlin en 3 días
La mejor forma de aprovechar una escapada de 3 días en Berlín y no perderte nada es dejarse llevar por su ambiente cosmopolita, donde se respira la libertad y hay una perenne sensación de movimiento, respeto y tolerancia.
Siempre se viene a la cabeza el muro, el eje vertebrador de la urbe y del que quedan algunos tramos en pie.
El Chekpoint Charlie es una atracción turística, pero da una idea de cómo era un paso fronterizo. El Museo del Muro del Checkpoint Charlie cuenta de manera gráfica la época de la Guerra Fría e historias de la pared más famosa del globo.
El East Side Gallery es el fragmento más largo del Muro y toda una galería de arte al aire libre. La foto junto al mural del beso de Brezhnev y Honecker es un clásico, si tu viaje es en pareja, ya sabes lo que toca.
El sitio conmemorativo de Günter Litfin, segunda víctima del muro en agosto de 1961, merece la pena ser visitado y pone un buen broche en lo que a muro se refiere.
Mucho más que el Muro
El Museo de la Topografía del Terror narra el auge del nazismo y el nacimiento del Reich, se encuentra en el lugar donde se establecía las temibles Gestapo y las SS.
Es una ciudad con un marcado carácter conmemorativo, ya que podemos visitar el Monumento a los Judíos de Europa Asesinados, compuesto por 2711 bloques de hormigón de diferentes alturas y que rememoran a las víctimas judías del Holocausto.
La puerta de Brandeburgo es el símbolo de la reunificación, y da comienzo al Parque Tiergarten y que es el principal de la ciudad. Siempre tiene mucha animación, pero es en primavera y verano cuando toma una vida especial. Dentro de este parque encontramos otros de los símbolos de la ciudad, la Columna de la Victoria.
La Potsdamer Platz es un centro vital y otro de los lugares de interés esta plaza, rodeada de edificios modernos y cuenta con un centro comercial, es el contrapunto a una ciudad llena de historia. Aquí es posible ver algunos trozos de muro.
La Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm, el Puente Oberbaumbrücke, la Catedral berlinesa, o el Urban Spree, un lugar al aire libre donde hay desde exposiciones a un mercadillo, son algunos de los lugares imprescindibles de ver en Berlín.
¿Viajas con niños? Berlín es tu destino
Y no, no nos olvidamos de los más pequeños. Una escapada de 3 días a Berlín con niños es posible.
En primer lugar, porque tiene los atractivos necesarios para que disfruten de la ciudad. El Museo de Historia Natural, donde ver el dinosaurio más alto del mundo, o el Museo Interactivo de MACHmit!, que está en una antigua iglesia reformada y en el que la diversión está asegurada, es recomendable de 4 a 12 años de edad.
Y no podemos obviar el Lego Discovery Center, un espacio donde podrán relajarse y dar rienda suelta a su imaginación, aunque seguro que los adultos también lo pasarán genial.
Y todo esto es mucho más cómodo gracias a la extensa red de transporte público, entre las que destaca el metro y su tranvía, con más de 400 estaciones.
Como puedes comprobar, conocer Berlín en 3 días es una experiencia grata, al ser una ciudad con un marcado carácter integrador y una incesante vida cultural.
Cafés, pubs, galerías de arte y un vivo ambiente de calle hacen de la capital de Alemania un destino imprescindible en tu agenda viajera.