La crisis demográfica en Alemania

Desde hace muchos años se habla de la crisis demográfica en Alemania. Tomando en cuenta las variables de tasa de nacimiento, volumen de inmigración entre otras, se pronosticó que para el año 2060 la población alemana se reduciría de 80 millones a 68 millones de habitantes.

Actualmente Alemania tiene una población de 82.800.000 hab. (2017) lo que ha hecho repensar un poco sobre el impacto real de la crisis demográfica alemana.

¿Es real esta crisis demográfica en Alemania?

Los números no mienten pero pueden dar resultados para todos los gustos. Cabe preguntarse, ¿si hay crisis demográfica en Alemania, entonces por qué la población ha crecido (poco, es cierto, pero ha crecido)?

Esto al parecer se debe a una situación, posiblemente pasajera, donde los índices de natalidad han subido de 1,4 niños por mujer a 1,6 niños por mujer. La otra cuestión es el incremento del número de inmigrantes que han venido a trabajar en Alemania al igual que de personas que buscan asilo político en Alemania.

Los especialistas opinan que esto no cambia el futuro sombrío que le espera a Alemania en relación a la disminución de su población. Las causas fundamentales aún se mantienen.

Por paradójico que suene, el hecho de que Alemania sea la economía más fuerte de Europa, y que sea una nación tan desarrollada en todos los sentidos, se ha convertido en un cuchillo para su propio pescuezo.

Los alemanes tienen una de las esperanzas de vida más elevadas a nivel mundial (y esta estadística continúa incrementándose año tras año). Con una tasa de natalidad tan baja, su población general está envejeciendo.

Esto quiere decir que no hay tantos jóvenes para mantener a su potente sistema social ya que los veteranos deben cumplir con el natural retiro que demanda el sistema y la vida misma.

Una solución ha sido aumentar la tasa de inmigrantes para suplir los puestos de trabajos que se van quedando vacantes, por ejemplo en las áreas de formación profesional dual o de la medicina en Alemania. Pero esta no es una solución sostenible en el tiempo.

A lo más, con una tasa de natalidad de 1,6 y las condiciones actuales de inmigración, la población general podría mantenerse pero no evitará que Alemania se convierta en un país de viejos. 

13.3 % jóvenes, 66.1 % adultos y 20.6 % ancianos son números preocupantes para cualquier nación que aspire a tener un futuro pujante.

Un problema común de los estados industrializados

Estas son consecuencias de naciones tan desarrolladas. Es una paradoja pero la lógica se impone: bajas tasas de natalidad sumadas a bajas tasa de mortalidad dan como resultados a naciones con poblaciones de ancianos.

Es probable que en el fondo escondan una solución al problema de densidad demográfica, pero lo que verdad preocupa a los alemanes es que ya no puedan sostener sus ritmos de desarrollo simplemente porque no tienen mano de obra para continuar.

¿Qué se debe hacer? ¿Iniciar un programa de natalidad? ¿Aumentar la inmigración?

A lo largo de la historia y de la prehistoria no ha sobrevivido el más fuerte, ni siquiera el más inteligente. En realidad el que ha logrado vencer es el que más se ha sabido adaptar. Y en eso los alemanes han demostrado ser muy buenos.

Fuente y más información en: www.dw.com/es/dejar%C3%A1-de-reducirse-la-poblaci%C3%B3n-de-alemania/a-37407687