Geografía alemana

Alemania es un país enormemente extenso. De hecho, es el séptimo país más grande del continente Europeo, convirtiéndose en el quinto si no contamos a Rusia, Kazajistán y Turquía.

Con aproximadamente 357.000 km2 de extensión, si no tenemos en cuenta los estados antes mencionados, sólo se encuentra aventajado por Francia, España y Suecia.

Como consecuencia de ello, es también un país de muchos contrastes y paisajes maravillosos.

Desde sus fronteras con el Mar del Norte hasta los macizos montañosos de los Alpes, pasando por amplias explanadas de grandes lagos, verdes valles e inmensos bosques, la geografía de Alemania es enormemente diversa.

Fronteras

Por su situación en el centro norte del continente, la República Federal de Alemania tiene frontera con diversos estados. En particular, es fronteriza con Francia, Luxemburgo, Bélgica, Suiza, Bélgica, Países Bajos, Austria, República Checa, Polonia y Dinamarca, así como con el Mar del Norte y el Báltico.

Puntos extremos

En particular, los puntos más extremos de la geografía alemana son los siguientes:

Punto más extremo al oeste: Millen, Renania del Norte-Westfalia.

Punto más extremo al este: Deschka, Sajonia.

Punto más extremo al norte: List, Sylt, Schleswig-Holstein.

Punto más extremo al sur: Haldenwanger Eck, Oberstdorf, Baviera.

Relieve

Como hemos mencionado, la gran extensión de Alemania hace que presente muchos accidentes geográficos distintos.

En particular, el país presenta tres grandes regiones bien diferenciadas.

Llanura en las cercanías de Bremen

La primera de ellas está compuesta por las tierras bajas del norte, en el plano norte-europeo, que son tierras planas caracterizadas por los grandes cursos de agua que recorren la zona.

Se suele considerar que esta zona se extiende desde la frontera con Holanda hasta las costas que confluyen con el inicio del mar del norte, y está caracterizada sobre todo por los grandes flujos de agua que están presentes en ella.

Los ríos Elba, Weser, Ems y Oder recorren este territorio en dirección norte, hay frecuentes humedales y pantanos, y también grandes lagos de origen glacial, sobre todo en la zona de Mecklenburgo.

Alto Valle del Rin Medio

La segunda gran zona de Alemania se encuentra más al sur, más o menos en el centro del país.

Conocida popularmente como la Alemania Media, es un territorio de grandes mesetas, con paisajes de gran verdor compuestos principalmente por destacados valles y colinas.

La imagen más icónica o tópica de Alemania que tienen las personas que no viven allí corresponde habitualmente a esta zona del país.

Incluye el importantísimo valle del Rin, todo el territorio que corta el país hasta los conocidos como Montes Metálicos, en la frontera con la República Checa, así como zonas como el Palatinado, las colinas Taunus del norte de Frankfurt y los bosques o “selvas” de Turingia y Franconia, entre otras zonas.

Se extiende aproximadamente desde la ciudad de Hannover, en el norte, y el río Meno en el sur.

Alpes Alemanes, Grainau, Baviera

Por último, nos encontramos la región montañosa del sur, donde se encuentran los grandes macizos montañosos del país.

Esto no implica que no haya importantes picos en las otras zonas de Alemania, pero en este territorio es una característica determinante y común.

Aunque podemos pensar que los Alpes suponen la formación montañosa más importante de Alemania, lo cierto es que muy poca parte de los Alpes se sitúa en la zona de Alemania, extendiéndose algunas de sus formaciones más importantes más allá de sus fronteras.

Los Alpes alemanes se encuentran en la zona de Baviera y Suabia, pero pese a lo que acabamos de apuntar, siguen siendo un reclamo de tipo turístico innegable.

Esta zona se extiende predominantemente desde el nacimiento del Danubio, parte de Baden-Wurtemberg, y cruza Suabia hasta la zona de Franconia Central hasta llegar a los grandes bosques de Baviera y a la frontera entre este último estado, la República Checa y Austria.

Es una de las zonas más extensas de la región y algunas de las zonas turísticas naturales más populares de la nación, como los ya mencionados Alpes y la conocida Selva Negra Alemana, entre otros ejemplos, se sitúan también en esta zona del país.

Costas

Alemania es un país que posee una gran cantidad de kilómetros de costa.

Limita con dos mares, el Mar del Norte y el Mar Báltico y un importante número de islas en estos mares pertenecen a esta nación, como las islas Frisias del Norte y orientales o la isla de Rügen.

Costa del Mar del Norte en Alemania

Suelen ser mares tranquilos donde no hay grandes oleajes, aunque las bajas temperaturas y la humedad que suelen reinar en estas zonas costeras provocan que no sean lugares demasiado turísticos en lo que respecta a las actividades marítimas o playeras.

De hecho, es muy habitual que los alemanes prefieran viajar a los grandes lagos del centro y el sur del país, con climas más templados, cuando quieren disfrutar de tiempo de ocio de tipo acuático en vez de acudir a las zonas costeras.

Por lo tanto, las costas alemanas no son un destino playero habitual, aunque en los últimos años han ganado relevancia como consecuencia de sus preciosos paisajes y su valor cultural y gastronómico.

Las costas alemanas tienen cuatro grandes bahías, una de ellas en el mar del Norte y las otras tres en el mar Báltico. Éstas son las bahías de Helgoland, Kiel, Lübeck y Pomerania.

Respecto a las islas que pertenecen a Alemania, ya hemos mencionado las más importantes, que son los archipiélagos de las Frisias, Orientales y Septentrionales, así como la isla de Rügen, pero también merece la pena destacar la isla de Helgoland y la de Fehmarn, de destacado peso en la región.

Ríos y lagos

Alemania es un país donde no sólo hay muchos ríos, sino que los principales se encuentran entre los más grandes y caudalosos del mundo.

El río Elba

Tres son los ríos más importantes del país: el Rin, con 865 kilómetros de longitud; el Elba, que tiene 727 kilómetros, y el Danubio, que tiene una longitud de 687 kilómetros.

Otros ríos importantes son el Weser, el Oder, el Saale, el Lahn, el Lippe, el Meno o el Mosela, entre otros muchos.

Los ríos alemanes, además de todos los beneficios que proporcionan al país desde el punto de vista físico, económico y climatológico, también actúan en muchas ocasiones como fronteras naturales y su presencia ha determinado en buena medida los asentamientos humanos que se han producido a lo largo del tiempo.

El Danubio, por ejemplo, tiene su origen en la zona de la Selva Negra y se extiende hacia Baviera.

El Elba recorre buena parte del país desde la frontera con la República Checa hasta su desembocadura en el Mar del Norte, y el Oder y el Neisse delimitan en buena medida la frontera del país con Polonia, entre otros ejemplos.

Por último, debemos destacar también los lagos. Alemania está plagada de grandes y preciosos lagos de todo tipo, algunos de los cuales forman impresionantes paisajes que conquistan a cualquier persona que posa sus ojos en ellos.

Lago Müritz, el más grande de Alemania

Entre todos, destaca el lago de Müritz, situado en la zona norte del país, en Mecklenburg-Vorpommern.

Otro de los lagos más conocidos del país es el famoso lago Constanza, que también se introduce en el territorio de Austria y Suiza y también destacan los lagos de Sarnberg, el lago Chiem o el lago del Rey, entre otros muchos.

Fuentes:
www.es.wikipedia.org/wiki/Geograf%C3%ADa_de_Alemania
www.geografia.laguia2000.com/geografia-regional/europa/union-europea/geografia-de-alemania-generalidades